Muchas veces hemos leído el relato de la crucifixión de Jesús de Lucas 23:26 al 43, pero esta historia tiene una enseñanza muy importante para nosotros que estamos viviendo en un mundo globalizado y en donde para muchos las historias del ayer y la Biblia ya no tienen relevancia.
Pensando en este relato me di cuenta que justo eso pasa con nosotros, estamos en la posición de los dos ladrones y tenemos dos caminos: El de rechazar el sublime y perfecto sacrificio que Jesús realizó por nosotros en la cruz o el de aceptar su amor, recibir su perdón y disfrutar con Él de la vida eterna.
El amor de Jesús por nosotros es tan maravilloso que aun siendo Dios aceptó humildemente morir en la cruz por nuestras faltas y en medio de su sufrimiento escuchaba las burlas de las personas que lo rodeaban; pongo acá un poquito de mi imaginación, posiblemente también miraba en sus turbulentos corazones e incluso vio el conflicto interno que tenían estos dos ladrones pero aun así le pedía a Dios diciendo «Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen».
¡Esta frase de Jesús es impactante! y me encanta ver que aun en medio de todo el odio y incredulidad hacia su amor, uno de los ladrones colgados creyó en Él diciéndole «Acuérdate de mí cuando llegues a tu reino». Este es el punto crucial de la salvación: Creer, aunque eso signifique ir contra la corriente del mundo, Pedir y recibir su perdón, Amarlo con el amor con que Él nos amó y Caminar según sus Palabras, las cuales están escritas en la Biblia.
Nuestra relación con Dios no debe ser lejana, acerquémonos a Él y no dejemos que su mensaje de amor y salvación sea cosa del pasado.
¡Compartamos su historia!