Hoy por la mañana, estaba en el Facebook, me gusta ver las publicaciones de la gente, muy pocas veces hago una publicación, pero, es interesante como los amigos y amigas del Facebook comparten con libertad, lo que piensan, sus sentimientos, sus alegrías.
Esta semana me llamó la atención todas las publicaciones que fueron posteadas sobre «el padre» de cada uno, lo primero que observe es que no hubo un solo recuerdo positivo sobre sus respectivos padres, encontré padres ausentes, padres alcohólicos, padres que ignoraron a sus hijos y muchas lagrimas, por eso me animé a escribir este articulo. Para mi, es mi opinión, refleja una situación social, significa que todas esas personas crecieron en hogares donde solo hubo una madre que dio su vida por esos hijos para que crecieran y tuvieron un futuro mejor; espero que esos hijos no hayan seguido el ejemplo de esos padres, sino se hayan propuesto cambiar el mundo dándole oportunidad a la nueva generación de niños, ahora sus hijos, siendo ellos buenos padres y no repitiendo lo que vieron en sus padres terrenales.
Lo otro que me inquieto es, el asocio que normalmente un ser humano hace con una experiencia vivida y todas las decisiones de la vida, la realidad es que las experiencias nos marcan, olores, colores, sabores, traen a nuestra mente experiencias vividas y reaccionamos a ellas según lo positivo o negativo que esa experiencia nos dejó. Mi inquietud es, todas esas experiencias negativas con los padres, marcó a esas personas para tener una relación con el Padre Celestial.
En la Biblia Dios se presenta como Padre, describe las acciones de Dios como padre en su trato con su pueblo, es el que perdona, el que salva, el que corrige, el que castiga, el que ama eternamente, el que educa, el que sufre el dolor de su hijo o hija, el que lleva en sus brazos a su hijo para que no se canse, el que da descanso al hijo cargado; ese es Dios, el Verdadero Padre.
Jesús en uno de sus sermones invita al ser humano a llegar con confianza al Padre, esa confianza basada en el amor, el hijo que se siente amado no teme llegar ante su padre y pedirle. Jesús, nos invita a pedirle al Padre Celestial, a que hablemos con Él, llamarle, pedirle. Jesús presenta al Padre como aquel que se deleita en escuchar a su hijo o hija, sin distingos de genero, aquel que anhela complacernos en todo lo de bien para nosotros, Dios el Padre Celestial es aquel que hace en su hijo o hija una obra perfecta.
No dejemos que las experiencias vividas con un padre humano, impida que veas al verdadero Padre, aquel quien te espera, te protege, te ama, te corrige. Invito al lector a dejar atrás el dolor generado por un padre que no tenía capacidad para darte lo que necesitabas y abre la puerta para que el verdadero Padre llene el vacío y te lleve a la dimensión de Su amor, con todas sus bendiciones.
«Mi Padre me ha dado todo, y es el único que me conoce, porque soy su Hijo. Nadie conoce a mi Padre tan bien como yo. Por eso quiero hablarles a otros acerca de mi Padre, para que ellos también puedan conocerlo. Ustedes viven siempre angustiados y preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar.» Mateo 11.27-28 TLA